Ya eres uno más

SEAS BIENVENID@

Los Salvatorianos en el Ecuador te damos un grato saludo y te invitamos para que no sea tú primera visita, sino que ésta te anime a regresar.

Nos gusta mucho compartir contigo nuestro caminar y nuestra fe, nos gustaría contar con tus comentarios y con tus palabras de aliento.

Que la fe en nuestro Dios Trinidad nos una cada día más, que juntos podamos entregar la buena nueva a todos y de todas las formas que el amor de Cristo inspire a los que aún no lo conocen. Bienvenid@

DESEO SALVATORIANO

Tomando las palabras de Juan les decimos:
"Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al Verbo de vida (porque la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó); lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo. Estas cosas os escribimos, para que vuestro gozo sea cumplido.".

1 Juan 1, 1-3

ORACIONES

Oración al Espíritu Santo 
(Esta oración es apropiada para antes de la lectura bíblica) 

Oh, Espíritu Santo, Dios eterno
Como el Padre y el Hijo,
Siendo los tres la Santísima Trinidad.
Deseo, con mi corazón sediento,
que tu sabiduría,
la misma que asistió a los escritores sagrados,
se digne en asistirme en el encuentro
con el mensaje santificador.
Para que lo leído sea comprendido,
lo comprendido sea aceptado,
 lo aceptado sea amado
y lo amado sea actuado.
Y así en la unidad con toda la Iglesia orante
construyamos el reino
anunciado por Jesucristo y anhelado por el Padre.   Confiando en la intercesión de la sierva del Señor, 
María Santísima, tengo la esperanza de recibir esta gracia.

                                                                                                Amén   


Oración de la Mañana
 (Esta oración es apropiada para iniciar el día)

Buenos días, Señor!
Un nuevo día que me regalas.
 Gracias con toda la fuerza que soy capaz.
Gracias por este nuevo amanecer.
Gracias por este nuevo empezar.
Gracias por tu presencia que me acompañará
en toda la jornada.

Quiero comenzar este nuevo día
con entusiasmo, con alegría re-estrenada,
con ilusión nueva.
Me da seguridad el saber que
tú estás a mi lado: en mi familia,
en mis amigos, en la gente
con la que me voy a encontrar,
en mi propia persona.

Te ofrezco mi trabajo de este día que
mi esfuerzo sea fecundo,
sirva para la felicidad de los demás
y me ayude a encontrar mi propia paz,
que con mi trabajo, mi día sea
un pedacito del mundo que busco y sueño.
Ayúdame a llenarlo de entrega y amor.

Señor, que hoy viva de tal manera que
cuantos se acerquen a mi descubran tu
presencia y tu ternura.
Buenos días, Señor, por este nuevo día
 que me regalas.

Amén
Oración de la Noche
 (Esta oración es oportuna para antes de ir al descanso)
Buenas noches, Señor
Antes de cerrar los ojos,
los labios y el corazón,
al final de la jornada,
¡buenas noches! Padre Dios.

Gracias por todas las gracias
que me ha dado tu amor;
si muchas son mis deudas,
infinito es tu perdón.
Mañana te serviré
en tu presencia, mejor.
A la sombra de tus alas,
Padre nuestro, abrígame,
quédate junto a mí y dame tu bendición.

Antes de cerrar los ojos,
los labios y el corazón,
al final de la jornada,
¡buenas noches! Padre Dios.

Gloria al Padre creador
Gloria al Hijo redentor
Gloria al Espíritu Santo santificador
Tres personas, sólo un Dios.

                                                  Amén