Ya eres uno más

SEAS BIENVENID@

Los Salvatorianos en el Ecuador te damos un grato saludo y te invitamos para que no sea tú primera visita, sino que ésta te anime a regresar.

Nos gusta mucho compartir contigo nuestro caminar y nuestra fe, nos gustaría contar con tus comentarios y con tus palabras de aliento.

Que la fe en nuestro Dios Trinidad nos una cada día más, que juntos podamos entregar la buena nueva a todos y de todas las formas que el amor de Cristo inspire a los que aún no lo conocen. Bienvenid@

DESEO SALVATORIANO

Tomando las palabras de Juan les decimos:
"Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al Verbo de vida (porque la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó); lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo. Estas cosas os escribimos, para que vuestro gozo sea cumplido.".

1 Juan 1, 1-3

viernes, 13 de septiembre de 2013

Ser evangelizador


P. Francisco Jordán, SDS


“Sea su finalidad: anunciar el evangelio en todas partes y por todos los medios que la caridad de Cristo le inspire”.


El P. Francisco, fundador de los Salvatorianos, consideraba que todo bautizado tenía como misión anunciar el evangelio y más aún sembrar la semilla de Reino de Dios en todo tiempo, en todo lugar y en todo hombre. Por ello soñó en fundar una comunidad en la que participaran todos: laicos, sacerdotes, religiosos y religiosas, solteros y casados, profesionales y artesanos, varones y mujeres, en fin todos, cada uno desde su realidad, en un mismo espíritu.  Pero la Iglesia no le permitió llevar a feliz término ese sueño; un supervisor del vaticano llegó a afirmar que tal sueño “era un arca de Noé”. Pero nada le desanimó y acogiendo las recomendaciones de la Santa Madre Iglesia fundo dos comunidades religiosas de varones y de mujeres. Muchos años después surgió la comunidad laical. Las tres ramas en el espíritu del Divino Salvador.

El Padre Jordán escribió en su diario espiritual: “Sé un auténtico apóstol de Jesucristo y no descanses hasta que hayas llevado la palabra del Señor a todos los extremos de la tierra. ¡Sé un verdadero pregonero del Altísimo!


Este santo fundador nos debe interpelar a preguntarnos ¿qué acciones hago yo para cumplir con mi deber de evangelizar como bautizado? Todos debemos ser evangelizadores; claro está que antes debemos ser discípulos del Señor y se es discípulo desde dos dimensiones, desde la oración y la vida sacramental y desde  el aprendizaje de la vida cristiana. Por ello antes de hacernos la anterior pregunta debemos preguntarnos ¿Conozco yo al Señor Jesús, puedo ser su enviado para evangelizar porque ya he sido un buen discípulo? Muchas veces queremos enseñar o hablar de Jesús pero en verdad somos pobres espiritualmente.